Extraña y maravillosa saga rusa basada en unas novelas desconocidas para mí -de un tal Sergéi Lukiánenko- que por su calidad y belleza plástica (pese a su confuso plantemiento) me veo obligado a comentar.
Con un inicio prometedor -similar en cierta forma al de LOTR- nos vemos inmersos en la epopeya personal del protagonista al tiempo que conocemos las intrigas de ambos bandos. Aquí se impone una aclaración: los Guardianes de la noche son los buenos mientras que los Guardianes del día son los malos -por si acaso ahí venía la primera confusión-.
La historia de un hombre que después de condenar a su ex-esposa (y su hijo no-nato) es reclutado por los Guardianes de la noche para vigilar que nadie rompa la tregua creada por ambos bandos. Esta tregua es una imagen de la pasada guerra fría superpuesta entre seres sobrenaturales.
En la película no faltan las escenas de acción de bajo nivel aderezadas con movimientos mareantes de cámara y confuso planteamiento en la pantalla. Tal es así que pese a la belleza y espectacularidad de algunas imágenes la película resulta ser una amalgama de situaciones en apariencia inconexas, una excesiva hipérbole en sus formas que hacen de ella una película difícil de seguir, extraña y confusa, que sin embargo en su final tiene su explicación.
Guardianes del día
Continuación de la anterior película en la que se nos situa unos años después de lo acontecido anteriormente. En ésta nuestro protagonista es acusado de romper la tregua antes mencionada siendo víctima de un complot urdido por el jefe de los seres -o criaturas o como sea- de la noche.
Si la anterior era de "visión difícil" esta aún es todavía más rocambolesca e hiperbólica. Su parte final es toda una aparente confusión que me remitió a los mejores momentos de «Zardof».
Sin embargo si alguien tubo los cojon las narices de ver la primera le aconsejo que no se rinda y vea la segunda parte -aún más larga- y poder terminar así esta historia autoconclusiva de dos partes. Aúnque sólo sea por la escena de la vampira conduciendo su Rx8 por la fachada del hotel -que más bien parece un ensaño de las rocambolescas escenas de acción de «Wanted»-.
En resumen estas películas en su conjunto es la carta de presentación del director Timur Bekmambetov -para bien o para mal-. Sí, más bien parece un órdago a la grande pero tampoco le fue tan mal porque su siguiente encargo fue «Wanted». Películas que no recomiendo al público en general dada su complejidad, duración y tema tan "especial"; pero no por ello dejan de ser interesantes y poseedoras de una belleza sin igual.
Como curiosidad cuando estoy viendo estas películas -sobre todo la primera- no puedo dejar de pensar en el ilustrador Dave McKean (al que los comiqueros recordareis por la novela gráfica Arkham Asylum o Casos Violentos o sus famosas portadas de Sandman o ...). Parece que el director -o el diseño artístico en total- se basaran en su arte para estas películas.
Ahora los trailers, que no pueden faltar. Aunque lo siento, pero del primero no he encontrado en español.
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