domingo, 1 de abril de 2012

Sin salida

Y sin remedio

Atraído por el trailer y por la presencia de la gran Sigourney Weaver y la firma de John Singleton me he dejado engañar por el vehículo de lucimiento de lobo (nueva mascota para el hijo de Bela) de Taylor Lautner. Un actor que más a menudo del deseable se olvida que actuar no es posar sólo con mirada chulesca y entrecejo fruncido.
Una historia que navega entre el rídiculo de algunos de sus pasajes con el interés de la trama nos muestra como  el lobo este descubre que es un niño de otros padres y que sus padres son agentes de la CIA y ... ¡si yo me he tragado la cinta para descubrirlo vosotros también!
El director cumple, la Sigourney Weaver no aparece más de 7 minutos en la película (menos mal que por ahí anda un tal Alfred Molina poniendo algo de calidad al asunto), pero el actor protagonista debería volver a clases de interpretación. Afortunadamente compite con él, y le derrota, su partener Lily Collins; la cual se erige como la gran ganadora del film.

Pues eso para pasar el rato, y ver las cachas del Taylor Lautner.



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