El cuerpo

Tío he perdido un cadáver.

Aquí tenemos la nueva sensación del momento en la cinematografía española. Un éxito de taquilla solo asumible al hecho de que el público español está ansioso de tragarse cualquier cosa con una trama más o menos decente que nos recuerde a los buenos tiempos que vivimos con gente como Amenabar.

Y no es porque sea un cuerpazo el de Belén Rueda. 

Una actriz que cada día nos demuestra su buen hacer ante las cámaras aunque sea una lástima que en esta película se pueda lucir más bien poco. 

Pero todo esto es realmente los adornos florales de la ceremonia en donde la auténtica protagonista es esa trama que nos presenta la incógnita de qué está sucediendo realmente. ¿Está viva la asesinada? ¿Quién juega con quién? ¿Son fantasmas? ¿Todo es un sueño o una alucinación del asesino?

Es un guión que intenta sumergirnos en una trama de misterio, intriga policiaca con tintes sobrenaturales. Lástima que desde el primer minuto (el increíble atropello del guardia nocturno -increible porque no me puedo creer que de noche un coche con las luces puestas no vea a un guardia con una linterna encendida en medio de la carretera, y viceversa-) la historia peca de momentos o actos absurdos por parte de algún protagonista o varios de ellos que restan credibilidad al metraje. ¿Vosotros os creéis que cuatro policias dejan escapar al principal sospechoso porque se "despistan" bajo el agua del sistema antiincendios? Pues encima estos hechos resultan ser cruciales para el desarrollo de la trama ¡manda huevos!

Sin embargo pese a ello aún el misterio te tiene en vilo y tu mente no para de dilucidar qué es lo que está pasando ante nuestros ojos. Pero a veces lo que pasa ante nuestros ojos no tiene razón de ser siendo las mismas creadas por el director para manipularnos y mantenernos en la ignorancia, y otras simplemente están de relleno. Pues ya me contaréis a santo de qué aparecen esos dos pegándose un "repaso" ante las cámaras sino es para sacar carne (tetas) en cinemascope.

En fin, resumiendo un poco el hecho es que realmente se deja ver y ellos actúan bastante bien. Lástima de que la ambición pudo al guión.